KIKO

¡De anclas a tintas!

Manuel Fernandez, alias KiKo, es un artista francés nacido en 1985 en Martigues, en este pueblo cercano a Marsella apodado la «Venecia de Provenza» que inspira sus colores mediterráneos y más particularmente ese naranja ardiente que inunda muchas de sus obras.

KiKo siempre ha tenido gusto por el dibujo. De niño se dice de él que dibuja como respira. Con un solo trazo asertivo, esboza las emociones que no expresan con palabras. La escuela sólo le fascina en las clases de artes plásticas y su camino, por tanto, parece claro. Pero el arte no es un tema en esta familia de marineros que primero tienen una pasión por el mar y en especial por la pesca del atún. Desde temprana edad, KiKo se unió a los atuneros familiares, gigantes de los mares de 30 m de largo amarrados en Port-Vendres, dejando sus lápices por redes de pesca; ¡No dejamos el barco así! Mayor, se hará a la mar durante muchos meses rastreando cardúmenes de peces colonizados por atunes. Aprende disciplina, manejo del miedo, resiliencia, trabajo en equipo, falta de sueño y soledad. Para huir de esta dura vida de marineros donde el mar le llama constantemente al orden, KiKo construye un universo imaginario donde la infancia que suspende allí su vuelo inspirará toda su obra.

El encuentro con su esposa es decisivo, ella es parte de una familia de artistas y su suegro le abre rápidamente las puertas de su estudio. Luego vuelve a conectar con su pasión y prueba diferentes medios en lienzos cada vez más grandes. Son las tintas chinas multicolores las que marcarán a KiKo; se dejó seducir por su fluidez y decidió entretenerlos a partir del papel tradicional para utilizarlos sobre lienzo. Le dan una firma única donde el street art se concilia con el expresionismo, privilegiando la emoción sobre la realidad. Las gotas de tinta china negra, parecidas al simbolismo de las lágrimas o la sangre, dan testimonio de una tristeza que contrasta suavemente con la alegría de sus fondos de colores.